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Por fin conocí a una chica que realmente me gusta, y habíamos salido en un par de citas y las cosas iban muy bien hasta ahora, pero ella quería que conociera y me relacionara con su madrastra. El día en que íbamos a revelar nuestra relación a ella, mi novia fue llamada al trabajo. Le dije que no era gran cosa y que podía conocer a su madrastra por mi cuenta. Así que, aquí estoy, toqué y la señora que me recibió fue la Sra. Janett Darcy, que era delgada y en sus mediados a finales de los 50. Tenía un cuerpo atlético y obviamente se cuidaba. Me presenté y aparentemente, ella había recibido alguna advertencia de que yo venía, porque me dejó entrar fácilmente a su casa. Nos sentamos en el salón y ella me preguntó si me importaba si fumaba. Bueno, era su casa, ¿por qué debería importarme y como se hizo evidente más tarde, la Sra. Darcy era una fumadora empedernida. Empezó preguntándome algunas cosas a las que respondí honestamente y luego la conversación se volvió muy extraña. De repente, salió y me preguntó si había tenido relaciones sexuales con mi novia. Luego me preguntó si podía tener relaciones sexuales conmigo. Empecé a preguntarme si todo esto era una prueba de mi fidelidad, pero ella siguió insinuándoseme y mi pene estaba duro como una roca. Hablamos un rato más, pero el punto principal fue que la Sra. Darcy me llevó a una habitación trasera de la casa y me folló y me chupó el cerebro mientras fumaba casi todo el tiempo.<\/p>
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